La Fiscalía de Instrucción del Distrito II, Turno I, a cargo de Milagros Gorgas, receptó declaración indagatoria a Emanuel Reynoso, en calidad de imputado, y con la asistencia de sus abogados. Lo hizo desde la cárcel de Bouwer por videoconferencia, y le fue informado de los hechos que se le atribuyen, la prueba en su contra y los delitos imputados: amenazas calificadas, lesiones leves reiteradas calificadas con el concurso premeditado de dos o más personas y agravadas por el uso de arma (3 hechos) y coautor de Robo calificado por la situación de infortunio particular del damnificado.
Con el asesoramiento de sus defensores, el imputado declaró y respondió preguntas. Negó los hechos y efectuó distintas manifestaciones, principalmente que no estuvo en el lugar de los episodios denunciados.
Lo que sigue
El Ministerio Público Fiscal, tal como corresponde, continuará con la investigación y la incorporación de más pruebas, entre las que se encuentran informes técnicos sobre los elementos secuestrados (teléfonos, imágenes); y la adopción de medidas para averiguar la veracidad de los dichos del imputado.
Si bien se ha procurado hasta ahora no fue posible identificar de otros presuntos partícipes Restan analizar distintas imágenes ofrecidas a la instrucción, que podrían ser de suma importancia, y es muy factible que se practique un examen de correspondencia analógica de rostros para llegar a individualizar a los implicados.
Otro aspecto importante a determinar en los próximos días será si Reynoso continuará o no detenido.
La normativa procesal indica que luego de la declaración hay 10 días para resolver. Las opciones son dos:
a) se dicta la prisión preventiva (disponiendo que continúe preso durante la tramitación del proceso)
b) recupera la libertad y la causa sigue igualmente instruyéndose.
Para resolver estas alternativas es importante establecer si sigue siendo imprescindible que Reynoso continúe detenido, y en ese sentido se valora si la libertad constituye un riesgo para que la prueba nos permita llegar a la verdad y la aplicación de la ley.
Se analiza también la situación de los testigos para que no peligren sus testimonios en la actualidad o en un eventual juicio futuro; y la posibilidad de que el imputado o sus allegados puedan poner trabas a la normal continuación del proceso.
Asimismo se evalúa el riesgo de fuga y si existen otras medida que puedan reemplazar el encierro.
Todos estos puntos, junto con aquellos que específicamente fueron puestos en consideración por la defensa al momento de declarar, están ahora siendo evaluados y probablemente en el transcurso de esta semana, se tome una decisión.